lunes, 21 de diciembre de 2020

martes, 22 de septiembre de 2020

Otoño 2020

Quien siga mi blog o actividad pajaril telemática sabe que ando un poco de capa caída, desde hace ya muchos años, debido al desencanto que supuso para mi inmiscuirme tan profundamente en los entresijos de una actividad tan deleznable como necesaria, la tenencia en cautividad de animales, especialmente de aves, algo que, a priori, choca frontalmente con los principios de conservación y respeto por la naturaleza; especialmente sabrá el lector que me refiero a la avicultura, la deportiva, pues la extensiva, la cientificamente respetuosa con los principios esenciales de la conservación, es en la que apuntalé mis valores y objetivos, y aun asi me siento falto de espacios de mayor libertad para mis animales, tiempo para cuidarlos y mejorar sus instalaciones, dietas y demás aspectos esenciales de sus vidas: Todo ello me ha hecho también dudar mucho del poder del asociacionismo, pues al final  -a las pruebas me remito-, la avicultura en general y los Agapornis en particular, no deja de ser un mundillo en el que por lo que realmente se mira es por el interés personal, nunca el de los animales -siempre hablando de forma genérica, incluyendo a un servidor-. Ciertamente para que la actividad conservacionista pueda desarrollarse bien, la única formula conocida realmente efectiva es la conjugación del interés personal, con un buen proyecto y respaldo económico, apoyo institucional y gubernamental y, por supuesto de la comunidad científica...  (no es el tema de fondo).

Llevo varios años pensando en esto, viéndolas venir, por eso este final del verano de 2020 he dado el paso, me he vuelto a centrar, esta vez en una sola especie, los Agapornis nigrigenis, evidentemente ancestrales, sin mutaciones (fenotípicas al menos) .

A.fischeri de 9 y 12 años (anillas BVA227)

Solo quedan en mi aviario, además de mi colección de A.nigrigenis, esas dos hembras viejas de A.fischeri de la foto, con unas anillas un tanto especiales (BVA227) y que por su edad, 12 y 9 años respectivamente, no estaban en condiciones de iniciar una nueva vida en Bélgica. El resto de mi colección de A.fischeri, dado que ya no podía mantener más cruces genéticamente viables sin aumentar mucho la consanguineidad -que me obligaban a adquirir nuevos ejemplares-, me han hecho desprenderme de ellos; pero no de cualquier forma, la verdad es que hace muchos años que no tengo que preocuparme por dar salida a mis animales, de hecho no es ni ha sido nunca mi objetivo, al revés, me estresa sobremanera todo el proceso de "envío"  o "recogida", pero lo mejor de todo es que gracias a la calidad de ejemplares que tengo y mi radical forma de ver las cosas, me han hecho que no tenga ni que anunciar que tengo excedentes, así que me puedo permitir el lujo de elegir yo a los dueños de las aves que salen de mi aviario, pues novios tienen en medio mundo; sinceramente no facilito aves a quien no creo que las va a cuidar bien. Y eso he hecho, solo una pareja ha quedado en España, para un socio de AECA que empezó hace relativamente poco tiempo y que me pidió una pareja justo en el momento en que estaba negociando la salida de todos los demás fischeri de mi aviario, el hecho de que sea de un pueblo muy cercano al mío me hizo decidirme para elegirle una pareja muy buena; los demás han ido a uno de los grandes criadores internacionales de esta especie, continuador, espero, de esta labor de conservación de ejemplares de "fenotipo ancestral".


Así que me quedo con el ave que realmente me enamoró hace ya más de 12 años, el Agapornis nigrigenis, ahora con todo mi aviario dedicado solo y en exclusiva a ellos, a mantener todo el tiempo que pueda una gran colección de ejemplares de fenotipo totalmente ancestral y con una genética perfectamente controlada... (por ahora).

Además, un hecho ocurrido hace una semana me ha hecho despertar nuevamente del letargo pajaril en el que me asiento tras llegar la primavera y juntar a los animales en colonias exteriores, una baja ocurrida por un descuido absurdo, tanto mío como del difunto ejemplar, un A.nigrigenis fue cazado por una Lechuza, de mi voladera nueva; una hembra muy buena, de líneas LPF, que dormía en una esquina de la voladera, demasiado "a mano" de unas zarpas y unos ojos que en la noche todo lo ven. La rapaz solo pudo comerse la cabeza, el resto del cuerpo no pudo sacarlo... Como dice otro buen amigo, las aves de jaula son presas ideales para las rapaces urbanas, es la propia ley de la naturaleza, que para unas aves también caídas en desgracia, como las lechuzas, cuya población disminuye también drásticamente, supuso una pérdida mucho menos dolorosa que las que he podido tener por motivos más "humanos"...

Así que le doy un poco de vidilla a mi afición; esto es un paso adelante, nunca atrás, y un poco de literatura lo refuerza... aquí sigo y seguiré, espero que ellos, mis nigrigenis, mucho mejor que ahora y, conservándolos, para siempre.

viernes, 18 de septiembre de 2020

Programa de Conservación

 Llamado AVIALE, finalmente el único y más personal programa para conservar la afición. Una apuesta por una sola especie -nuevamente centrarme en lo que hace muchos años debería haber hecho-, en la única especie de Agapornis de la que nunca me desprendería....  

AGAPORNIS NIGRIGENIS





 






lunes, 1 de junio de 2020

Reunión de Primavera-Verano 2020

Este año todo va mas rápido, todas las instalaciones limpias y desinfectadas mecánica y quimicamente, vacío sanitario y alojamiento estival adelantado mas de un mes...





miércoles, 25 de marzo de 2020

Sexaje de Agapornis por ADN, el momento idóneo...

En estos tiempos del Covid-19 me puedo permitir documentar algo tan rutinario, para mí, como es realizar las pruebas de ADN que determinan el sexo de mis Agapornis, por lo que aprovecho para realizar este articulo, por si le sirve a alguien que no sepa muy bien como va el asunto.

Lo primero de todo la gran duda ¿Dónde realizar dichas pruebas? No voy a hacer publicidad de ninguna empresa, pero si he de decir que en 15 años que llevo haciendo estas pruebas solo he usado dos laboratorios, uno extranjero, de Brasil, cuando en España era muy caro sexar; el otro Español, con el que llevo trabajando mas de 10 años y que nunca me ha fallado. 

Una vez escojamos un LABORATORIO, todos suelen ofrecer algún tipo de formulario imprimible para la adquisición del material genético, en este caso PLUMAS. Se rellenan los datos que exige cada laboratorio para sus formularios y una vez impresos empezamos el proceso.

PREPARACIÓN DEL MATERIAL:

Prefiero utilizar fotografías para explicar el proceso, ya que ofrecen una visión más practica del mismo, así que junto a cada una de ellas  incluiré unas notas aclaratorias, podéis pinchar sobre las fotos para verlas más grandes.


Lo primero que preparo es un nido con la entrada tapada, solo para el trasvase de los pollos y para no generarles mucho estrés; en él puedo dejar los pollos a los que ya he realizado la recogida de muestras, sin molestar a los hermanos de nido y sin equivocaciones cuando tenemos muchos ejemplares.


El material a utilizar es bien sencillo: Formularios para la recogida de las muestras, tijeras y cinta adhesiva, jabón y alcohol de limpieza de manos y las imprescindibles pinzas.


Es muy importante tener un buen espacio de trabajo para realizar la recogida, limpio y que posibilite la limpieza de las manos. Un detalle que creo es importante es preparar con anterioridad a la recogida los trozos de cinta adhesiva con la que fijaremos las plumas a los formularios.

Detalle cinta adhesiva.
EL MOMENTO IDÓNEO:

Es la pregunta clave: ¿Cuándo realizar la extracción? 

Es esencial calcular los tiempos de las distintas fases de la cría, desde las puestas a las eclosiones,  luego el anillado y, finalmente el caso que nos ocupa, el sexado. El momento ideal para sexar es EN EL NIDO, justo unos días antes de que lo abandonen

Una correcta planificación es esencial.
Para quien no tenga mucha experiencia, esos momentos se controlan de forma natural cuando se adquiere, pero en esencia el momento ideal es cuando veamos que el nido está como este:


Si las crías ya son volantonas tendremos dos "inconvenientes", que no problemas, que harán un poco mas difícil y estresante el proceso, tanto para el propietario de los animales como para las propias crias, ya que una vez salen del nido son extremadamente nerviosos, hay que cogerlos dentro de la jaula y, lo mas importante, las muestras no tendrán la misma calidad, hará falta arrancar mas plumas.

Pollo volantón.
Como una imagen vale mas que mil palabras, ésta que sigue es la que demuestra lo que he apuntado antes, si a los ejemplares les realizamos las pruebas cuando aun están en el nido, las plumas a recoger, que son las mas cercanas a la cloaca (PLUMAS CAUDALES), están en pleno crecimiento y contienen una gran cantidad de sangre, de material genético, con lo cual conseguimos dos cosas, una, no tener que arrancar de 4 a 6 plumas por animal, y dos, que una sola pluma nos serviría para realizar las pruebas con todas las garantías.

Muestras idóneas para analizar
EL PROCESO DE RECOGIDA DE LAS MUESTRAS:

El proceso es bien sencillo, si tenemos todo preparado como he explicado antes, se coge animal por animal, con todos los formularios ordenados por fecha de nacimiento -con algo de experiencia es fácil ir cogiendo las crias según edad-, con las pinzas se arrancan 2 plumas (o 3, 4 ... las necesarias)  y se colocan en el formulario sin tocarlas en ningún momento, especialmente los cañones, fijándolas con los trozos de la cinta adhesiva que habíamos preparado y cerrando el formulario con otro trozo.



Entre muestra y muestra lo ideal es desinfectar las manos y las pinzas con el gel, para que no exista contaminación alguna de ninguna de las muestras.


Finalizada la recogida de las muestras, se meten lo formularios en un sobre y se envían al laboratorio; con éste sistema, cuando los pollos son volantones ya sabremos su sexo, con todas las ventajas que ello conlleva.

.............

PD: El Covid-19 me ha permitido realizar este pequeño articulo pero a la vez me impide mandar las muestras al laboratorio.

Ello no supone ningún problema ya que, aunque el día de recoger las muestras fuese hoy (ya veis que una de las parejas de Agapornis fischeri tiene un pollo volantón, me he colado un par de días, o alguno mas), el laboratorio me ha confirmado que pueden pasar hasta meses y el material genético seguirá conservándose en los formularios. Por tanto, cuando llegue nuestra ansiada libertad y podamos salir otra vez a la calle, de lo primero que haré será enviar estas muestras.



miércoles, 26 de febrero de 2020

5.500 SUSCRIPTORES EN YOUTUBE

Es de celebrar que gracias a las 4.448.112 visualizaciones de mis videos en mi canal Canal de YOUTUBE he conseguido 5.500 suscriptores en este mes de Febrero de 2020, algo impensable en el año 2006, ya que no suelo echar cuentas sobre esto, pues cuando inicié el canal no tenia mas expectativas que las de crear videos como recuerdos sobre lo que siempre he hecho en esta afición, disfrutar de los animales que intento cuidar y proteger de la mejor forma posible, como una afición. 

Algo deben haber visto en mi labor tantas personas, pues humildemente solo puedo decir que lo hago simplemente por amor al arte, así que seguiré haciéndolo siempre, independientemente de que estos números suban o bajen. Así que a mis suscriptores, muchas gracias, espero seguir el resto de mi vida enseñando mis mejoras y la vida de mis Agapornis.



Mi último video: